Durante el tercer fin de semana de la Cuaresma de 2024, la Iglesia Conventual del Corpus Christi recibió a cientos de fieles y devotos debido a los actos y cultos de la Hermandad de Jesús Nazareno, especialmente con la veneración a su Sagrado Titular, Nuestro Padre Jesús Nazareno.
Para este fin de semana, la priostía de la corporación mercedaria montó un bello altar efímero presidido por el Señor de El Viso, que se ubicaba delante del presbiterio del templo conventual ataviado con túnica bordada en hilo de oro, corona de espinas y potencias de plata, y distintos broches y joyas. Durante la tarde del domingo, el Señor se encontraba sin portar la cruz, maniatado, para la realización del Vía Crucis hasta su Capilla propia dentro del templo tras el final de la veneración.
Así, el Señor estaba sobre una peana cuyo frontal proviene de la canastilla de su antiguo paso procesional, con un ramo de flores variadas a sus pies y siendo flanqueada la Sagrada Imagen por dos candelabros de tres brazos y faroles del antiguo paso procesional.
El retablo mayor del templo estaba cubierto por un gran dosel de terciopelo rojo, teniendo en la parte central el dosel que posee esta Hermandad para sus altares de cultos. En él se colocó el antiguo lienzo de la Virgen de los Dolores que se encuentra en el retablo lateral del Cristo de las Penas. Distintas piezas de platería, candelabros con puntos de luz y pedestales con jarras de flores completan el altar, además de los respiraderos del antiguo paso del Señor que se colocaron en las barandas del presbiterio.
Con este bello montaje, Nuestro Padre Jesús Nazareno recibió la veneración de los fieles, hermanos y devotos durante todo el tercer fin de semana de la Cuaresma. Tras esta veneración, el Señor volvió a su Capilla con el rezo del Vía Crucis, donde María Santísima del Mayor Dolor y Traspaso y San Juan Evangelista presidían la Capilla también con un bello altar efímero, dispuestos sobre la peana del paso de palio y con la nueva media luna que el Grupo Joven ha regalado a su Santísima Madre.
La peana estaba llena de azahar, lo que aportaba un gran aroma a esta Capilla, teniendo a ambos lados jarras de flores en tonalidades blancas y candelabros con cera blanca. A ambos lados de este montaje se encontraban dos faroles del antiguo paso del Señor.
Tras el Vía Crucis, el Señor quedó dispuesto delante de la Santísima Virgen de manera provisional, ya que pocos días después la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso fue subida a su paso de palio, donde aguardará la llegada de la mañana del Viernes Santo.
 Autor: | Antonio Javier Palma | Director de Cofradías El Viso. Estudiante de Ingeniería Informática. Miembro de la Escuela Ilusiones Danza. Hermano de la Hermandad Sacramental de los Dolores de El Viso del Alcor y de la Hdad de la Vera-Cruz de Salteras. |
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