Durante la segunda semana de la Cuaresma, la Hermandad del Cautivo celebró los Solemnes Cultos en honor a sus Sagrados Titulares, Nuestro Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Amargura. Tras el Solemne Triduo y la Solemne Función Principal de Instituto, las Sagradas Imágenes bajaron del altar efímero montado por la priostía para recibir la veneración de los fieles en devoto besamanos.
Para la ocasión, este besamanos se volvía a celebrar en el presbiterio de la Iglesia Parroquial de Santa María del Alcor, sede canónica de la corporación del Miércoles Santo, tras años celebrando este tipo de culto en la capilla lateral de dicho templo donde reciben culto diario las Sagradas Imágenes. La estructura principal del altar de cultos se mantuvo, con un dosel de damasco rojo cubriendo el retablo mayor del templo parroquial, con el frontal del altar compuesto por un terciopelo burdeos cubierto por un paño con bordados en oro. De esta forma, en el altar se disponía la candelería procedente del paso de palio de esta cofradía, colocando los puntos de luz de forma simétrica, teniendo en el centro un crucifijo de plata.
Justo delante del altar, sobre peanas marmóreas con pan de oro, se situaban Nuestro Padre Jesús Cautivo y María Santísima de la Amargura. El Señor Cautivo estaba ataviado con la túnica de tisú blanca bordada en oro, mientras que la Virgen de la Amargura lucía saya de terciopelo azul bordada en oro y manto de terciopelo burdeos liso recogido a la cinturilla. Los Sagrados Titulares de esta Hermandad se encontraban colocados juntos, esperando la veneración de los fieles y devotos desde la parte más alta del presbiterio, estando justo delante de los lugares donde la candelería del altar se hacía más presente.
Respecto al exorno floral, cuatro ramos de flores se encontraban repartidos por el altar, colocados entre los candelabros. Estos ramos estaban dispuestos en jarras de orfebrería, procedentes del paso de palio. Además, dos ramos de flores se encontraban flanqueando a las Sagradas Imágenes en el presbiterio, colocados sobre una alfombra. Todos estos ramos estaban compuestos por flores variadas en tonos malvas y violetas. Este montaje era completado por las colgaduras colocadas en las barandas del presbiterio, de terciopelo burdeos con paños blancos en la parte superior.
Este montaje sirvió no solo para este besamanos, en el que el Señor Cautivo y la Virgen de la Amargura se acercaron a los fieles y devotos, finalizando así los cultos cuaresmales de la Hermandad. También sirvió para el estreno de la marcha «Cautivo de tu Fe», que la Banda de Cornetas y Tambores Nuestra Señora de la Merced interpretó por primera vez en un concierto de marchas ofrecido al finalizar este culto.
 Autor: | Antonio Javier Palma | Director de Cofradías El Viso. Estudiante de Ingeniería Informática. Miembro de la Escuela Ilusiones Danza. Hermano de la Hermandad Sacramental de los Dolores de El Viso del Alcor y de la Hdad de la Vera-Cruz de Salteras. |
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