El último Viernes Santo antes de la Coronación Canónica de Nuestra Señora de los Dolores



La Semana Santa de 2025 encaraba ya su final con la salida de la última de las cofradías de El Viso del Alcor, la Hermandad Sacramental de los Dolores. Esta corporación, broche de oro de nuestra Semana Santa, se encuentra viviendo un año muy especial, ya que el 11 de octubre de este 2025 tendrá lugar la Coronación Canónica de Nuestra Señora de los Dolores, su Sagrada Titular.

Bajo un bello cielo prácticamente despejado, con la presencia de algunas nubes, las puertas de la Iglesia Parroquial de Santa María del Alcor se abrían a las 19:00 horas para dar comienzo la última estación de penitencia del presente año. Con esta salida se confirmaba que solo el Martes Santo se quedaba huérfano de cofradías en nuestra localidad, justo a la inversa de lo ocurrido en el año 2024.

Los nazarenos negros de cola precedían al Santísimo Cristo del Amor, que fue acompañado por la Banda de Música María Santísima de la Victoria, también conocida como Las Cigarreras. Esta formación interpretaría a lo largo del recorrido un exquisito repertorio de marchas de corte fúnebre, seleccionadas minuciosamente para acompañar a esta Sagrada Imagen. El exorno floral de este paso, el primero de los dos de la cofradía, estaba compuesto por un friso de variedad de flores silvestres. El Cristo del Amor lucía en este Viernes Santo el INRI original que trajo de Sevilla, junto al conjunto de potencias de plata sobredoradas.

Este largo cortejo de nazarenos de antifaces de color negro salió a la calle, aunque hacía aire y existía riesgo de lluvia en el tramo final de la estación de penitencia. Por ello, la Junta de Gobierno de la corporación decidió suprimir el transitar de la cofradía por el Mirador del Calvario, icónico lugar de la Semana Santa visueña. De esta forma, el cortejo giró hacia la izquierda al coronar la Calle Calvario, adentrándose en la Calle Jesús Nazareno directamente. El itinerario quedó así finalmente: Manuel Roldán «El Campanero», Amargura, Albaicín, Calvario, Jesús Nazareno, Carmona, Albaicín, Conde de Castellar, Plaza Sacristán Guerrero, Convento, Plaza del Ayuntamiento, Real, Plaza de la Recovera, Corredera, Rosario, Santa María del Alcor, Plaza Padre Nicasio y Manuel Roldán «El Campanero».

Por su parte, Nuestra Señora de los Dolores era acompañada por la Banda de Música Virgen del Castillo, procedente de la localidad sevillana de Lebrija. Durante la estación de penitencia, esta banda interpretó un repertorio de marchas de calidad, compuesto por marchas fúnebres y otras de corte más clásico o elegante. Dentro del repertorio musical de la Santísima Virgen hubo un guiño al centenario de dos marchas compuestas por D. Manuel López Farfán, «La Esperanza de Triana» y «La Estrella Sublime», interpretándose en distintos puntos del recorrido. La Santísima Virgen portaba sobre sus sienes la antigua corona de salida, estando ataviada con la Saya de las Guerreras y luciendo una toca de sobremanto, la más antigua de las que posee la Virgen, algo que no hacía en un Viernes Santo desde hacía muchos años. El exorno del paso de palio, además, estaba compuesto en su totalidad de claveles blancos con algo de verde.

La cofradía avanzó a un buen ritmo por las calles de la localidad, para evitar en lo máximo posible el posible riesgo de lluvia que había hacia el final de la estación de penitencia. Y, aunque fue en forma de unas leves gotas, la lluvia apareció con la cofradía transitando por Calle Real. Afortunadamente, en pocos minutos finalizó este chispeo, permitiendo a la cofradía culminar esta procesión con total normalidad, después de vivir bellos momentos por las calles de la localidad. Uno de ellos fue, por ejemplo, el transitar de los pasos por la casa donde vivía D. Ricardo Jiménez Palacios, deteniéndose los pasos en la puerta de su casa tras ser arrimados a su acera. Este doloroso, Hermano Ejemplar de la Hermandad, fue el encargado de traer a la localidad la imagen del Cristo del Amor, por lo que se tuvo el detalle de llevar su medalla dorada con un crespón negro en la custodia de la entrecalle de la candelería del palio.

Con la entrada de esta cofradía en el templo parroquial, la Semana Santa de El Viso del Alcor concluía finalmente. Atrás quedarían días de nervios, de incertidumbre y de penitencia, lo próximo sería vivir la Resurrección del Señor. Y en esta corporación sacramental, además, el júbilo de los preparativos de una Coronación Canónica en un glorioso 11 de octubre de 2025, tras los distintos actos y cultos preparativos para este fin.


Antonio Javier PalmaAutor: | Antonio Javier Palma | Director de Cofradías El Viso. Estudiante de Ingeniería Informática. Miembro de la Escuela Ilusiones Danza. Hermano de la Hermandad Sacramental de los Dolores de El Viso del Alcor y de la Hdad de la Vera-Cruz de Salteras.

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