Como cada año, la Hermandad de la Sagrada Entrada está celebrando en esta semana, vísperas del Miércoles de Ceniza, el Solemne Triduo en honor de su Amantísimo Titular, Nuestro Padre Jesús de la Salud.
Siguiendo un poco con el estilo del año pasado, el dosel es una pintura de un arco con molduras en tonos dorados, con el que se hace una alegoría de la Sagrada Entrada Triunfal en Jerusalén, misterio que representa esta Sagrada Imagen. Ésta se encuentra presidiendo en solitario el altar, estando ataviada con túnica blanca y el mantolín rojo de brocado que en ocasiones porta el Domingo de Ramos.
Dos jarras de flores en tonos rosas, más tres ramos a los pies del Señor, dan color a este altar que de nuevo da luminosidad al templo por los tonos claros del mismo. En el apartado de la cera, destaca el uso de altos codales en dos de los candelabros de guardabrisas del paso de misterio, situados sobre pedestales con la Cruz de Santiago, y que recuerda al tipo de iluminación que las hermandades utilizaban tanto para cultos como para salida en la primera mitad del siglo XX.
Estos cultos son los primeros de una larga lista que se irán sucediendo durante los próximos meses de marzo y abril, hasta llegar a Semana Santa. Un tiempo de preparación y de mucha actividad en nuestro pueblo.