Tras un fervoroso Rosario y las bellas palabras del visueño D. Nolasco Ruiz Jiménez, el pueblo de El Viso recibía un año más a un nuevo 12 de septiembre a las plantas de su Madre y Patrona Santa María del Alcor Coronada. Comenzaba así la madrugada más esperada que se desarrolló con el tradicional chocolate que une en convivencia y alegría a familias, amigos y vecinos.
Amanecía sobre los Alcores y El Viso recordaba a sus hijos difuntos con la Santa Misa de las 9:00 horas que precedería a una multitudinaria y solemne Función Principal de Instituto presidida por varios sacerdotes entre los cuales se encontraban el Vicario Parroquial D. Alberto Jaime Manzano, D. José Manuel Pineda Benítez y D. Manuel Campillo Roldán, naturales de nuestra localidad estos últimos, y en cuyo ofertorio los hermanos realizaron solemne protestación de Fe Católica bajo la atenta mirada de Santa María del Alcor, que lucía radiante en el presbiterio ya engalanada para su salida procesional, que tras el tradicional potaje, exponente por antonomasia de la convivencia visueña, daba comienzo puntualmente a las 20:30 horas de la tarde ante la gran expectación de propios y foráneos que entonaban su Himno cuando el ocaso precedía a la noche más hermosa del año.
Petaladas, sevillanas, plegarias, vivas y fuegos artificiales se dieron cita al paso de la Señora en su recorrido triunfal por las calles de la localidad en el que estuvo acompañada un año más por la Banda de Música que con tanto orgullo lleva su nombre a cada rincón de la geografía andaluza y cuyo repertorio musical rindió un merecido homenaje a D. Pedro Morales, recientemente fallecido, interpretando marchas tan notables como Virgen del Refugio o Esperanza Macarena, entre otras. Lucía la Stma. Virgen una toca de sobremanto sobre sus sienes que devolvió a quienes la admiraron a estampas anteriores a su Coronación Canónica en 2005 ya que desde entonces no lucía tal prenda. El Divino Infante por su parte lucía senda banda en color celeste con adornos dorados.
En torno a las 2:00 de la madrugada regresaba el paso de la Stma. Virgen colmado de miles de pétalos que a modo de ofrenda de amor caían desde las casas en su discurrir y que salpicaban a las más de 5000 varas de nardos que el domingo 10 de septiembre coincidiendo con el duodécimoaniversario de su Coronación Canónica fueron entregadas a la Señora en una bellísima tradición que une a mayores y jóvenes. El canto de la Salve y el Himno pusieron el punto y final a la noche más hermosa de los Alcores en la última chicotá de Santa María del Alcor dentro ya de su Templo Parroquial.
El próximo domingo 17 de septiembre la tradicional Romería a la Ermita de Los Molinos de Alcaudete pondrá el broche de oro a las Fiestas Patronales 2017.