El pasado fin de semana, el último antes del Miércoles de Ceniza de 2019, fue el primero de muchos de intensa actividad cofrade en nuestra localidad, con el besapiés del Santísimo Cristo de la Vera-Cruz y de Nuestro Padre Jesús de la Salud, además del besamanos de María Santísima de la Paz.
VERA-CRUZ
Se trataba del primer culto de regla de la Hermandad de Vera-Cruz y Rosario tras la primera fase de rehabilitación de su sede canónica, la Capilla del Rosario. El Santísimo Cristo de la Vera-Cruz se encontraba en besapiés a los pies del altar mayor, donde la Virgen del Rosario y la imagen de San Juan Evangelista presidían el templo desde la hornacina del altar. Fue un altar sencillo, con pocos puntos de luz, además de un par de jarras y bandejas de plata. Durante esta semana, tendrá lugar su triduo.
SALUD Y PAZ
El pasado año, la Hermandad de la Sagrada Entrada decidió realizar de forma conjunta el devoto besapiés del Señor de la Salud y el devoto besamanos de la Virgen de la Paz. Así, en el altar que recibe culto la Santísima Virgen durante todo el año se encontraba el Señor de la Salud sobre un trono, mientras que algo más adelante se encontraba la Virgen de la Paz, vestida de reina. Este culto se realizó tras el Solemne Triduo en honor de Nuestro Padre Jesús de la Salud en su Sagrada Entrada Triunfal en Jerusalén, el primero realizado en 2019 en la Iglesia Parroquial de Santa María del Alcor.