
Como cada año cuando se acerca el fin del Adviento, la Hermandad de la Redención y Esperanza ha celebrado sus solemnes cultos en honor de su venerada titular mariana, María Santísima de la Esperanza. Este año, la corporación del Martes Santo ha vuelto a celebrarlos en su capilla de la Barriada del Carmen, tras tener que celebrarlos en el templo parroquial el año pasado por razones de aforo.
Para estos cultos, la priostía de la Hermandad de la Esperanza ha montado un altar sencillo, que sigue la línea de años anteriores. Como el resto del año, la Virgen de la Esperanza ocupa su lugar habitual tras el altar, bajo dosel y rodeada de ocho puntos de luz, dispuestos de forma simétrica y junto a jarras de flores blancas.
A la derecha, el altar del Señor de la Redención ha sido exornado con jarras de claveles rojos y estatices, luciendo túnica morada.