La Hermandad de la Piedad ha celebrado su Solemne Quinario en honor de sus Sagrados Titulares en la pasado semana terminando con el devoto y filial besamanos que tendrá lugar los días 17 y 18 de marzo en su Casa de Hermandad, días de ajetreo y de besamanos en la corporación de la Madrugada que concluirá con la esperada salida procesional.
Este altar de cultos destaca por su tradicional montaje. La Santísima Virgen de la Piedad estaba ataviada por D. Antonio Bejarano que una vez más ha ataviado a la dolorosa de una manera magistral, llevaba camisa y saya burdeos bordada por hermanos y el manto de terciopelo azul con un encaje de gran calidad en el rostrillo y como novedad a modo de sabana para el señor llevaba un especie de mantilla o encaje donado por una hermana.
El altar estaba compuesto por candelabros de madera dorados propiedad de la Hermandad y otros plateados de la antigua candelería de la Hermandad Sacramental de los Dolores. Se ha usado las dos jarras del paso de misterio y dos pequeñas también de la Hermandad Sacramental de los Dolores, en las que había cuatro ramos con rosas malvas lirios clavellinas rojas y fresias rojas. En la parte central se ha colocado un ostensorio propiedad de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno enmarcando a un crucifijo propiedad de la corporación de la Madrugada visueña. Por último se ha utilizado la peana tradicional, dos champaneras propiedad de la Hermandad con azucenas y a los lados del altar de cultos se ha ubicado la bandera de la cruz y el estandarte de la Hermandad.